EL CONSULTORIO AMOROSO DEL DR. RODOLFI
tema de hoy: los pelos entre los dientes

Hola a todos.
Nuevamente con ustedes y respondiendo una cartita de Jimena Lorenzi que pregunta lo siguiente: "cómo puedo hacer para evitar los pelos entre los dientes?"
Bueno Jimena, si te referís a los pelos que te quedan después de chupar una buena pija, puedo darte un sinnúmero de gratas soluciones; ahora si te crecen pelos entre los dientes, yo no puedo hacer nada, excepto recomendarte un buen veterinario.
Pero seguro que Jimena chupa bien la pija, y no creo que deba recomendarle un médico de animales!
Ahora bien, el fastidioso momento después de la mamada es el que nos lleva a ésta incógnita de cualidades universales: qué hacer con los alambres ajenos cuando se entrecruzan en nuestros molares. El problema es de todos los días si usted, querido lector, tiene la suerte de chupar una cajeta todos los días; o como Jimena, que aparentemente le da sin cesar a la chota.
Estudiando el caso a fondo debo decir que la mejor solución para este problema es el PAN.
Usted se preguntará: "el pan?, qué tiene que ver el pan con todo esto?" Pues bien, el pan tiene muchas funciones y entre ellas podemos contar:
1- fines religiosos: cuando el pancito es usado como forma simbólica para representar el cuerpo de nuestro creador.
2- fines gastronómicos: cuando es utilizado con fines sangucheriles y/o tostadas para la merienda.
3- fines sociales: cuando alguien muerto de hambre nos manguea comida siempre le damos un pan, nunca una pechuga de pollo. Siempre pan.
4- fines bélicos: cuando el panecillo se endurece podemos utilizarlo como un misil con alto riesgo de ocasionar daño.
5- fines sexuales: más de un cararrota se habrá enterrado una flautita en el "caquero" de puro desesperado.
6- fines de limpieza: el pan posee cualidades "de arrastre" que se complementa con otras sustancias, por ejemplo, cuando alguien se atravesaba con una espina de pescado siempre le recomendaban que comiera pan: "...el pan la arrastra", decían...
Ahora bien, lo he comprobado personalmente (no hablo por boca de ganso) y cuando alguna pelambre femenina se queda atascada entre mis incisivos o caninos, me llevo un buen pedazo de pan a la boca y santo remedio...
Es por eso que de ahí en más, cada vez que voy a tener sexo compro medio kilo de miñoncitos o flautitas; y todo depende de la cantidad de sexo a realizar, por supuesto! Si voy a estar con más de una señorita puedo llevar un kilo o kilo y medio en senda bolsa de mercado; además pensando en la posibilidad de compartir un mandrugo a mi pareja de momento.
Ya sea en su casa, o en una escalera o en el mejor telo de la Panamericana, siempre llevo conmigo la bolsa de pan, ah si...
Háganme caso, si van a coger con todo, algo más importante que el portaligas y el cotillón y que la dama entregue la rosqueta es el pan.Y no le den bola a las miradas torbas y a los comentarios ignaros por parte de la gentuza que nada entiende!
Eso sí, no sirve usarlo con mantecas o margarinas o jaleas porque pierde su condición "de arrastre".
Forma de uso? Fácil! Llévese un pedazo de pan a la boca y juguetee con la mascada llevando el bolo cerca del pelo atravesado. Si no se libera rápidamente no desespere, dele tiempo al pan a que haga su trabajo. Una vez liberado el pendorcho usted elegirá qué hacer con el pan, ya que puede escupirlo o tragarlo; le digo que tragarlo es cosa de guapos y escupirlo está mal visto por la religión, así que si lo piensa escupir, primero escupa el bolo sobre su mano y béselo para no tener problemas con el Creador, cualquiera sea su nombre y apellido. Una vez besado métaselo de nuevo en la boca y tráguelo, y hágase hombre.
De más está decir que este consejo sirve para ambos sexos.
Espero haber sido de gran ayuda.
Yo, por mi parte voy a comprar pan. Me espera una noche de novela.